
Generalmente esta enfermedad no tiene repercusiones graves, no obstante hay excepciones en las que el individuo que la padece, enferma gravemente y puede incluso llegar a morir.
Con la vacuna se previene la enfermedad, aunque puede no ser totalmente efectiva, de manera que el sujeto desarrolla la enfermedad igual, pero su gravedad va a ser mucho menor que si no recibiese la vacuna.
Esta vacuna se administra en dos dosis, a niños de 1 año y a niños de 4 años aproximadamente.
La vacuna puede traer consigo efectos secundarios leves, tales como fiebre o dolor en la zona de inyección, y en casos extremadamente raros puede aparecer neumonía o convulsiones (1 de cada 1000 niños).
No se debe administrar a: mujeres embarazadas (las mujeres que acaben de vacunarse deben esperar al menos un mes para quedarse embarazadas), inmunodeprimidos, niños que están tomando ácido acetilsalicílico, o personas alérgicas al antibiótico neomicina o a la gelatina.
Aún así, ante cualquier duda acerca de esta vacuna, consulte con su médico.
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