El dengue es una enfermedad infecciosa causada por un virus que puede adquirirse por la picadura de un mosquito. Los síntomas incluyen fiebre alta, dolores de cabeza, dolor en las articulaciones y los músculos, vómitos y una erupción cutánea.
Hay muchas farmacéuticas que intentan descubrir la ansiada vacuna contra esta enfermedad, causada por cuatro serotipos distintos. No tiene un tratamiento específico, por lo que encontrar una vacuna y protegerse ante la picadura de los mosquitos es la única defensa posible. Además, es una enfermedad exclusiva del ser humano por lo que no es posible ningún modelo con animales para realizar el estudio.
La farmacéutica que más se aproxima a encontrar esta vacuna es Sanofi Pasteur, que de hecho ya ha ideado una. El problema de ésta es que sólo es eficaz antes tres de los serotipos del dengue, el 2º “esquivó la vacuna” según explica el vicepresidente. La eficacia en esos tres serotipos es elevada: 61,2% contra el tipo 1; 81,9% contra el tipo 3 y 90% contra el tipo 4. Pero a pesar de todo, expertos en el tema afirman que fue una gran decepción y algunos hasta se atreven a apuntar que “será mejor reformular la vacuna”. Otras compañías también intentan conseguir esta vacuna, disminuyendo además el número de dosis (pasaría de 3 a 1).
Pero aunque aún queda mucho camino por recorrer, ya se ha arrojado un rayo de esperanza para alcanzar la que es, según Cameron Simmons, “el santo grial” de muchas farmacéuticas.
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