Una nueva serie de ataques en una campaña de vacunación contra la polio dejó tres muertos más en Pakistán (ya había muerto 6 personas días previos), obligando a las OMS a suspender sus actividades para erradicar esta enfermedad, aún endémica.
En este país, miles de padres siguen rechazando esta vacuna para sus hijos, debido a la presión de algunos islamistas, los cuales consideran, erróneamente, que esta vacuna contiene cerdo, provoca infertilidad y que además la campaña está financiada por Occidente para debilitar a los musulmanes.
Algunos talibanes también se oponen a esta inmunización, acusando a los voluntarios de ser espías de Occidente, sobre todo después del llamado caso Afridi. Este caso ocurrió en Mayo, y en él, el paquistaní Afridi participó en una falsa campaña de vacunación contra la hepatitis B organizada por la CIA, en la que se realizaban extracciones de sangre a miembros de la familia de Osama Bin Laden, para confirmar que éste se encontraba en la ciudad.
En todos los casos, los vacunados son acribillados a tiros mientras administran las vacunas.
Tras estos incidentes, la OMS y UNICEF que supervisan y apoyan la campaña de vacunación, suspendieron sus actividades en todo el país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario